Jeff Buckley

Escuchar el EP 'Live at Sin-è' de Jeff fue uno de esos momentos que ocurren sólo unas pocas veces en la vida de un fanático de la música: era algo de otro mundo, y me dejó conmocionado con la profundidad del talento que mostraba. No puedo comparar su voz a nada, tenía una amplitud de influencias realmente inusual, de Sonic Youth a Edith Piaf. Jeff y yo nos hicimos amigos, y cuando actuábamos juntos le miraba e intentaba desentrañar cosas como: “¿Cómo es posible que aguante esa nota tanto tiempo?”.

Pero puedes tirarte todo el día hablando de aspectos técnicos y no ir a ningún lado. Jeff tenía la habilidad de cantar a cappella casi susurrando en un club a rebosar y podías oír un alfiler caer: eso no es destreza, es otra cosa.

Había una tenacidad casi punk-rockera en la manera en que te obligaba a fijarte en el lado afeminado de su voz. Vi actuaciones en salas llenas de tíos con camisas de leñador, y podía convertir una canción cualquiera en una doliente interpretación a cappella. Lo seguía haciendo hasta un punto que estaba más allá de la incomodidad para esos tíos que estaban allí tratando de ser duros. Te causaba incomodidad tanto tiempo que luego tenías una especie de iluminación y te dabas cuenta de que este tipo no tenía miedo. Escucharle cantar es una de esas indicaciones de que la raza humana no es del todo mala, de que la vida merece ser vivida y de que hay belleza y brillantez en la humanidad.

  

Nacimiento: 17 de noviembre de 1966 (murió el 29 de mayo de 1997).

Canciones clave: 'Mojo Pin', 'Last Goodbye', 'Hallelujah'.

Ha Influido a: Chris Martin, Damien Rice, Rufus Wainwright.